Andrómeda

– ¿Qué mañana? Si mañana es hoy.

Así de tajante respondía ella mientras abría la ventana. Afuera, aguardaba una lluvia que ardía y, adentro, constelaciones de caricias revolvían su pelo.

Su pelo, que aún ondea como bandera de Andrómeda, es mi desayuno preferido los domingos.

Comentarios

Deja un comentario